CREATIVIDAD EN EL APRENDIZAJE DE LA LENGUA Y LA LITERATURA
“Niño tonto, no sabes nada de la historia de Fantasía. Es el mundo de las fantasías humanas. Cada parte, cada criatura, pertenecen al mundo de los sueños y esperanzas de la humanidad. Por consiguiente, no existen límites para Fantasía”
La historia interminable, Michael Ende
La mayoría de veces se asocia el concepto de creatividad al ámbito artístico, es decir, en las asignaturas de plástica y educación musical. Pero en realidad, la creatividad se puede desarrollar en todas las áreas del currículo, con una gran cantidad de recursos y estrategias didácticas.
Para poder adquirir un grado de creatividad en el aprendizaje de la lengua, debemos dejar de lado los recursos utilizados anteriormente, como son los libros de texto, como únicos recursos válidos en la enseñanza. Nos tenemos que centrar en el paradigma comunicativo de la lengua. Es decir, enfocarnos en la importancia que tiene la interacción, como medio y como objetivo final en el aprendizaje y en el conocimiento del lenguaje.
Por otro lado, se debe de incentivar otro tipo de métodos y estrategias, creando pautas de enseñanza, donde se tengan en cuenta las competencias y las necesidades de cada uno de los alumnos/as.
Uno de los ejemplos para trabajar la creatividad en las aulas en la asignatura de lengua y literatura, podrían ser las tertulias dialógicas. Estas son actuaciones de éxito desarrolladas en comunidades de aprendizaje, que consisten fundamentalmente en la construcción colectiva de significado y conocimiento, en base al diálogo con todo el alumnado o las personas que están participando en dicha tertulia. Este método es el que intentamos aplicar en las clases del Centro de Estudios My Study, para que el alumnado sea consciente de aquello que están leyendo y también puedan interactuar con el resto de compañeros. De este modo, intercambian ideas, opiniones o puntos de vista en situaciones reales de comunicación.
En la actualidad, la creatividad tiene un papel fundamental para todos los aspectos de nuestro día a día. Por ello, como docentes debemos de educar en igualdad, respeto, empatía, consideración, flexibilidad, y creatividad. Nosotros/as somos los primeros que debemos tener una mente abierta, para poder transmitir al alumnado todos estos valores.
Por otro lado, la creatividad abre muchas barreras en todos los ámbitos de la vida, y debemos inculcar estos aspectos a nuestros alumnos/as. El objetivo es que abran la mente y amplíen todos sus conocimientos, tanto sociales, como culturales y académicos. La creatividad no sólo debe ceñirse a un número de áreas determinadas del currículum, sino que debe abarcar todas y cada una de las áreas que comprenden los contenidos a lo largo de esta etapa.
Para finalizar, la creatividad puede fomentarse a la vez que se avanza en el proceso de enseñanza o aprendizaje del currículo determinado por la legislación educativa vigente LOE_LOMCE. Pues, no solo la interrumpe, sino que la enriquece. De esta manera, los alumnos/as se sienten mucho más motivados, y los aprendizajes adquieren son más significativos.
Alba Poyato Belmonte.